Cuando se conoció el sorteo del cuadro del Master 1000 de Cincinnati se sabía que la suerte no había acompañado a Nicolás Jarry. Y es que dentro de un certamen comprimido en el que las primeras rondas ya presentan duelos interesantes, que lo emparejen con uno de los jugadores de mejor presente es una especie de mala fortuna.
Argumentos para temer una derrota de la Torre en manos de Lorenzo Musetti sobraban, de un lado y del otro. Mientras el italiano viene de ser semifinalista en Wimbledon, finalista en Umag y medallista de bronce en París 2024, el chileno atraviesa una de las peores rachas de resultados desde que se mantiene en el circuito ATP. En ese contexto, la derrota en el tie break del tercero haya sido, quizás, la que mejores sensaciones le trajo a un Nicolás Jarry que no sale victorioso de la cancha desde que se impuso a Tommy Paul en Roma.
Paradójicamente, ese triunfo le abría un panorama ilusionante teniendo en cuenta que había obtenido el derecho de jugar su primera definición de Master 1000 después de una semana de ensueño donde ya había dejado en el camino a oponente de la talla de Stefanos Tsitsipas, quien venía de consagrarse en Montecarlo. Después de esa competitiva final que terminó cediendo ante Alexander Zverev, todo se vino a pique.
Hay que destacar que luego de eso apareció en el oído del nacido en Santiago un fuerte dolor que lo llevó a retirarse de algunos torneos en los que estaba anotados, pero se presentó en otros y todavía no pudo frenar su caída. La primera dolorosa llegó en Roland Garros ante el local Corentin Moutet que casi no le dio chances, tampoco alcanzó el segundo partido de Wimbledon porque Dennis Shapovalov lo despidió como lo hizo Alexei Popyrin en los Juegos Olímpicos y Tomás Etcheverry en Montreal.
Nicolás Jarry todavía no se va
Así como se describió que para encontrar un triunfo de Nicolás Jarry hay que retraerse al mes de mayo, vale la pena destacar que se habla de la disciplina en singles. Si se incluye dobles, vale la pena destacar que junto a Alejandro Tabilo pasaron el turno inicial de los Juegos Olímpicos para caer en el segundo.
Quizás buscando sensaciones similares es que el chileno se anotó en esta disciplina para hacer pareja con el ascendente francés Arthur Fils y lo logró ya que ayer se estrenaron con éxito frente a los belgas Joran Vliegen y Sander Gillé por 6-2 y 7-5. Mañana los esperan los número dos del mundo Rohan Bopanna y Matthew Ebden.
